domingo, 11 de abril de 2010

Las líneas de Chávez 67

Golpe y Contragolpe: ¡Revolución!


Nº. 67 de fecha 11 de abril de 2010. El 11 de abril siempre estará ahí para recordarnos cómo pretendió triunfar y fracasó la muerte, recordamos también qué clase de país se proponía la oposición mediática y contrarrevolucionaria, para no olvidar nunca la sangre que se derramó ese día


I
Hoy domingo, 11 de abril, recordamos el inicio del auge y caída de la dictadura más breve de la historia, recordamos también el calvario del Cristo-Pueblo que resucitó al tercer día, nuestro 13 eterno. El 11 de abril siempre estará ahí para recordarnos cómo pretendió triunfar y fracasó la muerte, recordamos también qué clase de país se proponía la oposición mediática y contrarrevolucionaria, para no olvidar nunca la sangre que se derramó ese día. Sangre venezolana, tanto bolivariana como opositora. El golpe de abril es un punto de inflexión en nuestra historia como pueblo, que cobró conciencia de que él mismo es quien lucha y construye su propia historia, y nos demostró, para siempre, que todo 11 siempre tendrá su 13 en la Patria de Bolívar.

¡Todo golpe tendrá siempre su contragolpe revolucionario!
¡Honor eterno a nuestro bravo pueblo y a nuestros bizarros soldados!

II
La media luna, a fuerza de pueblo, va dando paso en el cielo libertario a la luna llena boliviana. Con los resultados electorales del domingo pasado, una vez más Bolivia lanza a los cuatro vientos una clara señal: la libertad, la justicia y la soberanía, fuentes matrices del legado originario, se 127099374213a21jpg afianzan, crecen, se profundizan y remontan vuelo, mientras que los intereses apátridas, sombras del pasado discriminatorio, excluyente y colonialista, pierden terreno en su empeño desolador.

En una ocasión, Evo Morales dijo con admirable certeza refiriéndose a los tiempos de cambios que vive su Patria: “Este es el momento para que todos sepan que nuestra lucha no termina, que de la resistencia pasamos a la rebelión y de la rebelión a la revolución”. Estas palabras revelan tanto el propósito como el destino que hoy se encarna en todo el pueblo boliviano, que se levanta y echa a andar hacia un horizonte de plenitud, sin bajarle la frente a ningún poder dominante. Ha llegado, pues, la hora de los pueblos que entraron a la historia para no abandonarla jamás. ¡Viva la Bolivia nueva, la Bolivia hecha pueblo, la Bolivia ancestral, la Bolivia socialista!

III
Nos señala la vieja conseja socialista que los pueblos se transforman a sí mismos a través de sus actividades, en la medida en que transforman sus circunstancias en función del bien común. Y si esto se realiza con la unión de países que compartimos un legado y un destino común, las nuevas conquistas a favor de los pueblos cobran mayor trascendencia y profundidad. Este fue el espíritu que marcó esta semana la primera visita del hermano Pepe Mujica, presidente de la República Oriental del Uruguay. Pensar y actuar en procura de la multipolaridad como un nuevo orden mundial pasa necesariamente por la consolidación de Nuestra América. Los ocho acuerdos firmados entre nuestros pueblos en materia de seguridad energética y soberanía alimentaria se orientan en ese sentido y vienen a convertirse en un reimpulso de nuestras relaciones, basado en la solidaridad y el respeto como única vía para que, de manera conjunta, podamos alcanzar la verdadera y real independencia definitiva.

IV
De nuevo una enorme decepción para quienes se desvelan más por los planes desestabilizadores que por la felicidad de la Patria. Contra todos los pronósticos infundados de la oposición desalmada que estimaban el colapso definitivo de la energía eléctrica para estas fechas de abril, no sólo ya van entrando las lluvias, sino que además el plan de emergencia ha dado resultados satisfactorios. El ataque combinado de siembra de plantas termoeléctricas y del plan de ahorro energético, pese a los sabotajes, demuestra que la situación tiende a superarse y que no habrá ninguna crisis insalvable, como algunos creían. Pero con el afán de blindar al país en su recuperación definitiva y asegurar el abastecimiento para eventuales contratiempos futuros, hemos extendido las medidas de emergencia eléctrica sesenta días más, tiempo que nos permitirá lograr todos los objetivos que nos hemos planteado en el sector energético.

Aquí seguimos demostrando que hay un Gobierno que no descansa ni escatima esfuerzos para hacerle frente a las terribles consecuencias del cambio climático, que en nuestro país se ha manifestado con la recia sequía que hemos padecido. Sequía que nos ha permitido iniciar un cambio sustancial en la cultura del consumo y del aprovechamiento cabal de nuestros recursos. Por todo lo que hemos adelantado desde la creación del Ministerio del poder Popular para la Energía Eléctrica, felicito desde estas líneas a nuestro ministro Alí Rodríguez Araque, a todos los trabajadores del sector, hoy más que nunca comprometidos con el proyecto socialista, y al pueblo todo, porque juntos estamos demostrando que Venezuela se crece en las crisis. Los hijos y las hijas de Bolívar somos, como nuestro magno padre, “El pueblo de las dificultades.”

V
“Mientras no podamos fusionar en una misma organización a ocupados y desocupados, con reivindicaciones y programas para ambos, mientras persista el afán de copar, de hegemonizar gremios y partidos y no haya lugar en sus direcciones para el pluralismo que hay en sus bases, mientras en los frentes permanentes, o en los circunstanciales para una lucha determinada del pueblo, no se les dé cabida por igual a todos los que están por esa lucha, mientras todo esto siga así: seremos parias económicos y sociales. Quienes también tenemos el deber de organizarnos para salir adelante”. Así decía aquel gran dirigente del Movimiento de Liberación Nacional - Tupamaros Raúl Sendic en un breve artículo por allá por 1987, continuando con el acento uruguayo con el que pasamos esta semana.

Llegamos a la decimoctava semana de discusiones dentro del Partido Socialista Unido de Venezuela. Sabemos que la discusión ha sido nutrida, mientras se van constituyendo las bases programáticas que caracterizarán al partido, dándole mayor cuerpo y cohesión ideológica, de cara a las elecciones internas en mayo. Por eso asomo la cita del gran dirigente Tupamaro, para acentuar una arista necesaria en el debate de nuestro partido: lo escrito por Sendic en 1987 conserva intacta su vigencia, más aún cuando nos encontramos en plena construcción de poder popular, de la vía venezolana al socialismo.

Es también un mensaje para las y los 3.527 candidatas y candidatos que se postulan para las elecciones internas, con la misión de reflejar en la acción ese “pluralismo de las bases” del que nos habla Sendic. Ustedes mejor que nadie saben la responsabilidad fundamental y sagrada de ser pueblo en ejercicio revolucionario y transformar aún más las actuales relaciones de poder, de militar con calidad revolucionaria. Candidatas y candidatos: ustedes asumen el reto que la Patria exige con el objetivo de profundizar la Revolución Bolivariana en unidad, fortalecer el rumbo socialista obedeciendo al pueblo que los elegirá: el mandar obedeciendo. Tenemos que estar a la altura de nuestra historia.

Estas próximas elecciones están llamadas a superar el gran ejemplo democrático que dimos en 2008 para las elecciones de nuestros candidatos para los comicios regionales. No sólo somos la fuerza política más numerosa, somos también la más democrática y participativa: necesario es volver a vencer.

Finalmente, compatriotas, les invito a que nos sumemos desde ya, con infinita alegría y amor patrio, a los eventos históricos del Bicentenario, toda esta semana que hoy comienza.
¡Vivamos a plenitud de conciencia la resurrección de Venezuela!
Digámosle a Bolívar con nuestro canto Bicentenario: ¡¡Padre, no araste en el mar!!
¡Aquí está, ha aparecido en el horizonte la maravillosa cosecha de tu heroica siembra!
¡Patria bolivariana o muerte!

¡Venceremos!

Hugo Chávez Frías

Las líneas de Chávez 66

¡Independencia!

Nº. 66 de fecha 4 de abril de 2010. Este abril de independencia, este abril bicentenario, nos pinta la resurrección del Cristo-Pueblo que marca la nueva historia patria


I
Cuando se publique esta nueva entrega de Las líneas de Chávez, estaremos celebrando el Domingo de Resurrección. Como en otras ocasiones lo he dicho, el Cristo liberador completa su ciclo y marca la historia de la humanidad para siempre.

Este abril de independencia, este abril bicentenario, nos pinta la resurrección del Cristo-Pueblo que marca la nueva historia patria.

II
Abril de independencia, abril de rebeldía popular: "Dios santo qué bello abril, qué bello abril, qué bello abril. / Abril otra vez para que no tengamos b soledad / para que no tengamos nunca más soledad", como dice una bella canción de Fito Páez.

Abril de huracán revolucionario hecho pueblo, para romper en tiempo record una tiranía que quiso retornar para instalarse de nuevo sobre la Patria sufriente, poniendo en fuga a quienes seguían el dictamen de sus amos del Norte.

"Ya no nos van a espantar imperios tan hostiles
Que habremos de levantar verdades o fusiles
Ya dejando atrás los tiempos de ingenuos e infantiles
Que nunca habrán de faltar febreros ni más abriles".

Recordando junto contigo, querida lectora, querido lector, esta hermosa estrofa de la canción Febreros y abriles del gran cantor bolivariano y revolucionario Amílcar Briceño, quiero decirles a todos aquellos que siguen jugando al golpe de Estado, obedeciendo los mandatos del imperio; a quienes siguen jugando a colmar la paciencia de un pueblo noble pero que también es un pueblo bravo, que nunca habrán de faltar febreros y abriles si se atreven: el nuestro es un pueblo heroico. Y como bien decía nuestro Libertador allá por el año 1819: "Esta Patria es caribe y no boba".

III
Pocos días faltan ya para la celebración del Bicentenario del 19 de Abril de 1810. Un día que tiene que ser de fiesta nacional y popular, pero que también debe convertirse en el punto de partida de un gran ejercicio de reflexión colectiva y permanente, durante toda esta Era Bicentenaria que culminará el 17 de diciembre de 2030.

Así como aquel 19 de Abril de 1810 "todo el pueblo venezolano -sin distinción de clases ni de fortuna- fue llamado a deliberar sobre los asuntos públicos", como bien nos lo recuerda Augusto Mijares, citando las vibrantes palabras del prócer Antonio Muñoz Tébar en el primer aniversario de tan magna fecha, a partir de este 19 de Abril todos los venezolanos y venezolanas deben ser convocados no sólo a deliberar, sino también a anticipar el carácter de transformación social profunda y radical que debe tomar, en lo sucesivo, nuestro actual proceso revolucionario en el avance hacia nuestra independencia definitiva, a través de la vía venezolana al socialismo.

Más allá de cortar las ataduras con las que nos doblegaron ante el imperio yanqui, cosa en la que no hemos desmayado en estos once años de Revolución, de lo que se trata, una vez más, es de la plena realización de nuestro ideario político emancipador, para cambiar radicalmente, desde ahora y para siempre, toda la nefasta organización económica y social en la que se ha apoyado el largo y aún existente régimen colonial que ha padecido Venezuela.

"¡Conciudadanos! Me ruborizo al decirlo: la independencia es el único bien que hemos adquirido a costa de los demás. Pero ella nos abre la puerta para reconquistarlos bajo vuestros soberanos auspicios, con todo el esplendor de la gloria y de la libertad", decía nuestro Libertador Simón Bolívar por allá en 1830. Sea entonces oportuna la ocasión para congratularnos porque, no sólo nos hemos reapropiado de las bridas del potro de nuestra liberación e independencia, sino que, hoy más que nunca, hemos reabierto la puerta y estamos reconquistando todos los demás bienes, con todo el esplendor de la gloria y la libertad que se merece nuestro pueblo.

IV
Tal y como lo dije este Jueves Santo, quiero reiterarlo, recordando aquella memorable novela de Nicolai Ostrovski que se titula Así se forjó el acero: estamos forjando, como en acero, un mundo nuevo, un mundo pluripolar. Rusia juega un papel clave en Eurasia y en el mundo entero, y lo está haciendo con una inmensa dignidad. Nosotros, en una escala menor, hacemos lo propio aquí en Nuestra América. Cada quien con su perfil, su proyecto nacional y en su ámbito geoestratégico, pero no para encerrarse en sus propias fronteras, sino para participar activamente en la construcción de un nuevo sistema mundo. Por eso mismo, la visita del primer ministro de la Federación de Rusia, Vladimir Putin, a Venezuela, reafirma nuestra Alianza Estratégica.

Fue una intensa agenda la que cumplimos con Putin: comenzó la misma apenas el Primer Ministro bajó del avión, con una visita al legendario Buque Escuela Kruzenshtern, insignia de la marina mercante rusa.

Firmamos 31 documentos, entre acuerdos y convenios, tras una intensa jornada de trabajo en el Palacio de Miraflores, abarcando diversos ámbitos: el tema militar; el de la energía petrolera, gasífera y nuclear; el tema del espacio ultraterrestre; el de la educación e investigación; el tema de la agroindustria y el del comercio; el de la infraestructura y el del trasporte terrestre y aéreo, y el tema cultural. Como se puede ver, se trata de una Nueva Ecuación que cada vez crece más y más a través de un conjunto de factores de alto nivel: unos en plena ejecución ya, y otros que se van agregando, como el factor nuclear.

Quiero destacar que firmamos una trascendente declaración política, centrada en nuestra memoria histórica: con el más hondo reconocimiento al valor supremo de los 200 años del inicio de la batalla por nuestra Independencia definitiva; y rindiéndole tributo al 65° aniversario, no sólo del fin de la II Guerra Mundial, sino, en esencia, de la gran victoria del pueblo soviético y del Ejército Rojo ante el fascismo, tras la Gran Guerra Patria que millones de hombres y mujeres protagonizaron heroicamente.

No quiero dejar de mencionar que el Palacio de Miraflores sirvió de escenario para el encuentro entre el primer ministro Putin y nuestro entrañable hermano Evo Morales. Rusia y Bolivia se dieron cita en Venezuela: he allí un signo luminoso de cómo el escenario internacional está cambiando radicalmente.

Rusia y Venezuela se han encontrado en la construcción de un mundo pluripolar para alcanzar el equilibrio del Universo que pregonara Bolívar. Este es nuestro camino y nadie nos apartará de tal propósito.

V
Quiero hacer mención especial a un tema de gran significación nacional y que, debido a la llegada de la Semana Mayor, pudo pasar desapercibido, en cierta medida, por muchos compatriotas que tal vez ya estaban disfrutando del largo feriado. Me refiero al gran logro alcanzado por Venezuela en los IX Juegos Suramericanos Medellín 2010: 89 medallas de oro, 77 de plata y 97 de bronce para totalizar 263 preseas, ubicándonos sólidamente en el tercer lugar del medallero. Esta es una nueva confirmación de que, hoy por hoy, nos estamos convirtiendo en una potencia deportiva gracias a la Generación de Oro: a su darse por entero, en cada disciplina, demostrando el más genuino compromiso con la Patria.

Ciertamente, quedamos unas cuantas medallas por debajo de nuestra histórica actuación en la edición anterior de los Suramericanos. Varios fueron los factores que conspiraron para impedir que nuestra cosecha fuera mayor. Sólo voy a mencionar dos: un arbitraje que, en muchas ocasiones, fue injusto e, igualmente, ciertos cambios a última hora en los reglamentos que rigen algunas disciplinas, promovidos por las autoridades de Odesur. Pero, a pesar de todo, más pudo el coraje y vergüenza patria de nuestros muchachos y muchachas que jamás se amilanaron.

Lo digo y lo afirmo a través del ejemplo que encarna la Generación de Oro: estamos ante una resurrección colectiva. ¡Venezuela ha resucitado definitivamente! Somos un pueblo que ha decidido levantarse y hacerse respetar en cualquier escenario.

¡¡ Es la Venezuela Socialista!!
¡Venceremos!

Hugo Chávez Frías